El pasado martes 27 de mayo, se llevó a cabo la emotiva ceremonia de investidura para las estudiantes del 3°D de la especialidad de Atención de Párvulos, un evento que marca su transición de la etapa teórica a la práctica, reforzando su compromiso con los valores y responsabilidades de su futura profesión.
Gracias a los recursos proporcionados por la Ley SEP del Ministerio de Educación, las estudiantes recibieron sus uniformes técnicos profesionales, símbolo de vocación, entrega y servicio a la comunidad.
La directora Cecilia Martínez Salas, en su discurso, destacó la importancia del uniforme como representación de la sensibilidad y empatía necesarias para desempeñar esta labor, subrayando el compromiso con la niñez:
“El uniforme que hoy reciben no es solo un símbolo de su especialidad, sino de la responsabilidad y amor con el que acompañarán a los niños más pequeños. Fortalezcan su vocación, que responde a un llamado de Dios a servir.”
El profesor jefe Ignacio Herrera también dedicó palabras inspiradoras a las estudiantes, resaltando el significado de este momento:
“Que esta investidura sea solo el comienzo de una gran historia. Una historia escrita con amor, vocación y sueños por cumplir.”
Durante la ceremonia, el Padre Pedro de la Paz bendijo los uniformes, pidiendo que las jóvenes sean guiadas por el Padre Providente y María Santísima en su camino profesional.
La encargada de Formación Técnico Profesional, Karen Tapia, reforzó el compromiso de las estudiantes con el uso responsable del uniforme y el orgullo de llevarlo.
Para cerrar el evento, la estudiante Dabsy Cortés Pizarro, en representación de sus compañeras, compartió una emotiva reflexión sobre la importancia de este paso en sus vidas:
“Hoy es un día muy significativo para nosotras, que marca el inicio de un nuevo capítulo lleno de retos y aprendizajes. Este uniforme representa nuestra vocación y el compromiso de siempre llevar en alto el nombre de nuestro colegio.”
Además, rindió homenaje a figuras clave en la historia del colegio, recordando el legado de Madre Emilia, Madre Bernarda y Madre Joseph, quienes dejaron una huella imborrable en la comunidad educativa.
Tras la entrega de los uniformes, las familias de las estudiantes compartieron con ellas este especial momento, brindándoles felicitaciones, flores y muestras de cariño, en reconocimiento a su esfuerzo y dedicación.
Este evento reafirma el compromiso, vocación y entrega de las futuras profesionales, quienes inician un camino lleno de aprendizaje y servicio en el ámbito de la educación infantil.