Con gran participación y espíritu comunitario, se realizó el Encuentro de Padres en el Espíritu, dirigido a las familias de las estudiantes que se están preparando para recibir el Sacramento de la Primera Comunión, el próximo 5 de noviembre.
La jornada comenzó con la firma de asistencia por parte de los apoderados, seguida por un afectuoso saludo de la Encargada Sacramental, Srta. Pilar Rojas Orrego, quien dio la bienvenida a todos los presentes y agradeció su compromiso en este proceso tan significativo.
Durante el encuentro se compartió la Lectura del Evangelio del día, acompañada de una profunda reflexión sobre la Palabra de Dios, destacando el rol fundamental que cumplen los padres en el acompañamiento espiritual de sus hijas.
Orientaciones para las familias
La coordinadora entregó una guía clara sobre el papel de los padres en esta etapa, recordando que la catequesis del colegio acompaña, pero no reemplaza su rol como primeros educadores en la fe. Entre los aspectos más relevantes se destacan:
- Renovar su propia fe y fortalecer el vínculo con la vida sacramental.
- Participar activamente en reuniones y misas dominicales en familia.
- Enseñar con el ejemplo, transmitiendo la fe desde el testimonio.
- Recordar el bautismo como primer sacramento y conectar su significado con la Eucaristía.
- Rezar juntos y fomentar la oración familiar.
- Explicar la Misa para que las niñas participen con conciencia y reverencia.
Asimismo, se enfatizó que las estudiantes deben comprender el valor de la Eucaristía, el sentido del perdón a través del sacramento de la Reconciliación, y desarrollar una relación personal con Jesús.
Requisitos y preparación para la ceremonia
Se recordó a los apoderados la importancia de contar con el Certificado de Bautismo y haber realizado la primera Confesión antes de recibir la Eucaristía. Además, se entregó en mano el Protocolo de Ceremonia, con las indicaciones para la celebración que se realizará el miércoles 05 de noviembre a las 12:00 horas. En casos excepcionales, este protocolo podrá ser entregado al apoderado.
Finalmente, se invitó a las familias a vivir este momento como el inicio de una nueva etapa en la vida espiritual de sus hijas, poniendo el foco en el significado profundo del sacramento por sobre la celebración social.